Hace tiempo que quería publicar este breve post. Son dos artistas a los que soy devoto. Antonio Vega vino en 1957 y se fue este 2009. Nico vino a este mundo en 1938 y se fue en 1988. ¿Qué fue lo que los hizo comunes? Bueno sus talentos extraordinarios, sus carreras imborrables y su terrible camino por las sustancias que se suponen están hechas para el placer pero que finalmente se llevaron a ambos para siempre.
Antonio 1987, nadie presentía lo que vendría después.
Antonio 2007 o 2008, la heroína ya plagaba sus venas.
Nico 1975 televisión francesa. Lou Reed en la guitarra. Todavía era la mujer más hermosa del Pop.
Nico comienzos de los ochentas, aquí mostrando sus inmensos y bellos ojos bajo los efectos de innumerables estimulantes.
Escribir sobre danza moderna es un tópico que por primera vez toco en toda mi vida. Recuerdo hace muchos años mientras hojeaba la revista Taxi -que dirigía el fenecido Hugo Salazar del Alcázar- haberme encontrado con un magnifico escrito de José Carlos Huayhuaca sobre una simple anécdota ocurrida en una calle limeña. Huayhuaca conduciendo su auto se detiene a indicación de la luz roja de un semáforo, gira su cabeza y tiene la oportunidad de ver a un grupo de albañiles en la operación de subir una gran cantidad de materiales de construcción a una segunda planta, el rutinario hecho se tornó a los ojos de Huayhuaca en una perfecta coreografía, en cuerpos que inconscientemente poseían la gracia de ser un preciso conjunto de movimientos. Luego de leer eso la danza dejó de ser algo ajeno a mí.
En Bélgica vive una extraordinaria mujer de alrededor de cincuenta años que desde inicios de los ochentas revolucionó la danza de su país y de medio mundo, se llama Anne Teresa De Keersmaeker. De hecho que mi primer interés en la danza fue motivado por la música y la belleza del cuerpo femenino. Y quien mejor que Anne Teresa para ordenar todo con precisión magistral y lanzarme un flechazo fulminante. Su obra más conocida se llama Rosas Danst Rosas (1983) y es la oda dedicada a la mujer más importante que podrás ver en lo que se conoce como danza moderna.
Si esto te parece extraordinario aquí te presento su puesta coreográfica anterior de 1982 llamada Fase.
La experiencia de sentarte en una sala de teatro y contemplar lo que se presenta sobre sus tablas es única, personal e intransferible. Tú y yo de seguro estamos muy lejos de Bruselas o tenemos muy pocas monedas para viajar a New York y pagar el costosísimo valor de una entrada. Para nosotros, esa "inmensa minoría" -término que le oí a Marco Aurelio Denegri- ahora tenemos la oportunidad de ver estas dos puestas en escena en video, no cualquier video sino valiosísimos trabajos fílmicos -dirigidos por Thierry De Mey- que nos ponen al alcance el disfrute celestial.
Post Scriptum: Al consultar sobre el valor de registrar obras de teatro y danza en video me dijeron que eso ya no es lo mismo, que vendría a ser algo más cercano al video arte, bueno si es así a mi no me importa, demos la bienvenida a el enriquecimiento del trivial video.
Debbie Gibson es una coetánea mía. Ella nació en Brooklyn, yo quiero vivir en Brooklyn. Ella a los 17 años era muy popular en el mundo, yo a los 17 esperaba con impaciencia el fin de mi dilatada época escolar.
Luego ambos persistimos en tomar caminos disimiles. Yo pasé a sobrevivir con el sudor de mi frente y ella en el 2001 decidió limpiar su imagen de rubia tarada. Playboy se encargó de darle tribuna, no con ninguna declaración o concienzuda entrevista sino con unas cuantas fotos. El resultado de su lucha reivindicativa: seguía siendo una rubia tarada pero con un físico inversamente proporcional a su limítrofe coeficiente intelectual.
Hoy Debbie es Deborah, hoy aparece en cualquier evento en donde pueda codearse con la gente que jamás se atrevió a gastar dinero en sus repugnantes discos, es decir, la podemos ver en Cannes, en algún festival ochentoso o en Broadway. Pero lo importante es que yo y otros antifans queremos verla calata una vez más.
Post Scriptum: El video siguiente es una muestra cruel pero franca de lo que significa PATETICO.
Hoy empieza esta sección dedicada a todo aquello que deberíamos denostar, despreciar, demoler,hacer añicos por estar reñido al buen gusto. El problema es que muchas de estas especies a ser extinguidas gozan de mi cariño y mi mirada complaciente.
Perú 0 –Argentina 6, el mejor mundial que vi de nuestros bravos muchachos. Rod Stewart tú eres el elegido, tú el artista que desde 1978 recibiste las peores críticas que se pueden imaginar, todos querían al Rod de Jeff Beck Group o al de Faces, pero Rod aburguesado al máximo, sobrexcitado sexualmente hasta más no poder y coqueadamente chic se mandó con Da ya think Im sexy? un éxito en el Studio 54, en la población negra y en cualquier pista de baile que vibraba ante el fenómeno de la música Disco. Lo que recuerdo del tema es su video, con el característico peinado cuasi canino – la raza favorita de Rod son los afganos-, los pantalones ajustadísimos y el exitoso juego de seducción frente a una rubia resbalosa. Este tema definitivamente me marcó debido a que lo que presenciaba y escuchaba no tenían en absoluto nada que ver con mi gris existencia en esa epoca y de alguna manera hoy tampoco.
Fernando Belaunde toma el poder y Visage saca su Fade To Gray. En 1980 Rod Stewart comprende que el New Wave empieza a poblar los gustos juveniles y con su disco Foolish Behaviour se pone más synth y lanza su single Passion. Definitivamente se equivocó, pero igual vendió discos por toneladas. Yo recuerdo que conseguí la letra de la canción y la escribí en mi hermosa Olivetti Lettera.
Frente a mi televisor, grabadora Panasonic en mano grabo todo lo que Disco Club me ofrece. En 1981 Young Turks suena por todas partes, nadie entendía por qué ese homenaje a los jóvenes turcos. Años después me explicaron que Young turk es la jerga con que los ingleses nominan a los jóvenes rebeldes.
De ese mismo álbum otro video clave, Tonight Im Yours. Rod esta vez vestido de fucsia o rosado no lo sé, canta al pie de una enorme piscina rodeado de docenas de mujeres. Piernas, tetas, culos y bikinis por doquier, una verdadera carnicería. Su influencia sobre mí: es el primer empujón en mi interés por la disciplina como la entendía Sacher Masoch.
Los primeros videos de Mtv en la tele perucha. Baby Jane y What Im gonna do son los singles de su peor disco el Body Wishes. Ese año aparece en canal cuatro el programa Rock Of The Eighties y en Unitel canal 27 pasan muchos videos, Super Fm parece que se va del aire y Doble Nueve se me vuelve más interesante.
Por favor no revises debajo del colchón y ten cuidado con mis binoculares. En 1984 podía entender lo que era ese estado de infatuación del que Rod Stewart hacía referencia en su tema homónimo.
Ya lo que vino después me dejó de interesar, la “otra música” me había capturado. Solo volví a escuchar a Rod cuando hizo el cover de Downtown Train -original de Tom Waitts- y me llenó de ganas de volver a New York, específicamente a Brooklyn. Rod fuiste un grande.
A William Friedkin ahora se le ningunea con facilidad asombrosa. Ya nada le queda de cuando a comienzos de los setentas ganó 5 premios Oscar por The French Connection, luego su otro éxito comercial fue The Exorcist en 1973. Luego vino un fracaso tras otro fracaso. En 1980 filmó Cruising, la película fue tratada como pornografía gay y ahí finalmente Friedkin sepultó su carrera. Hizo cuanto pudo, pero no fue suficiente. Empezó a trabajar como director de Opera y de vez en cuando filmaba algo sin mucha creatividad y haciendo que todo el mundo extrañara su talento. El 2006 alejado al fin de los grandes estudios y con un magro presupuesto, presentó lo último que se sabe de él, la inquietante Bug.
Agnes (Ashley Judd) es una mujer que carga encima el trauma del robo de su hijo en un supermercado, lo cual la ha hecho aficionada al alcohol y otras sustancias. Su marido Jerry (Harry Conick Jr.) y padre del hijo desaparecido, es un delincuente que acaba de salir de prisión y que aun siente un amor enfermo por ella.
R.C. (Lynn Collins)–amiga lesbiana y colega de trabajo - lleva al cuarto de Agnes a un nuevo conocido, un tal Peter Evans (Michael Shannon). Tragos y coca van y vienen pero el sexo no aparece. Agnes simpatiza con Peter, el nuevo conocido es ciertamente medio raro, algo distante, algo misterioso, pero presenta cierta conmovedora ternura. Finalmente los nuevos conocidos deciden hacen el amor. Peter ya más relajado confiesa a Agnes que es un ex miembro del ejército y que ha escapado de un hospital, porque está harto de los tratamientos a los que ha sido sometido, ella enamorada lo escucha y decide que se quede para siempre.
Una noche un bicho imperceptible pica a Peter. La noche siguiente parece que la habitación está atestada de esos minúsculos insectos, tan minúsculos que Agnes apenas los puede ver. Algo espantoso es descubierto por Peter, esos bichos están en su sangre y al parecer empiezan a poblar todo su organismo, Agnes aterrorizada le ruega ir a un médico para acabar con su mal pero él contesta que recién se da cuenta que el internamiento en el hospital de retirados de la guerra ha sido solo para hacer de él un experimento, introducirle esos bichos que seguramente portarán un chip para localizarlo. Aquí viene lo más enfermo, Agnes empieza a convencerse de la fantástica versión de Peter, pronto deciden aislarse, empapelan toda la habitación con papel aluminio y Peter cuchillo en mano empieza a cortar su piel para así expulsar los endemoniados bichos de su cuerpo. Pronto en una espiral de locura mutua empiezan a elaborar las conjeturas más extrañas con respecto a su encuentro, nada ha sido casual, todo ha sido manipulado, ella finalmente es la que a través del semen se Peter, se ha convertido en el santuario de la hembra madre de los bichos, profundamente conmovidos descubren que en algunos galones de gasolina y algunos fósforos se encierra la liberación.
He conocido gente esquizofrénica, pero esta historia lleva al límite la enfermedad, peor aún, te muestra que el desorden mental si te encuentra mal parado puede ser contagioso. Eso te daría la explicación a esos fenómenos de masa que fácilmente pueden acabar sustentándose en la sinrazón.
La película es claustrofóbica, quieres que los protagonistas salgan de la bizarra habitación de ese Motel de Oklahoma, que todo se acabe pronto, que la razón toque la puerta, y quien lo hace es el psiquiatra de Peter que al fin lo ha ubicado y está dispuesto a dar luz a los desvaríos tanáticos de ahora no uno sino dos enfermos mentales. ¿Y que hace el Peter al verlo?, bueno, lo reconoce y lo apuñala para luego mostrar a Agnes que su sangre no es sangre, que el doctor es un ser sintético creado por la inteligencia humana con fines malévolos.
En mi juventud todo estaba claro. Sabias lo que tenias que vestir, leer, ver por TV, escuchar, en fin lo que estaba de moda. Yo y otros estábamos fuera de esa sabiduría popular. Pero en lo que a música se refiere en 1991 Smell Like Teen Spirit cambió mis perspectivas. Ese inmenso abismo entre unos y otros se cerró. Todo estaba revuelto, el pop, el mainstream, el alternativo. El sistema se apoderó fácilmente de los disidentes, había desaparecido esa confortable paz en que mis oídos podían discriminar qué era qué.
Un día en casa de un amigo escuché a los Orange Peels, Pavement y a un montón de bandas despreocupadas de su sonido pero con canciones plenas de emoción, por supuesto que todas eran de alguna manera deudoras de la Velvet Underground. Descubrí que detrás de los Pixies, Sonic Youth, etc. existían innumerables grupos que sin importarle su éxito se zambullían a hacer cientos de canciones de la forma más honesta posible.
Ya a finales de los noventas con el inicio de la debacle de la industria discográfica, la internet empezó a prestarse en ser la mejor forma de difusión de esta movida bautizada como Indie, que abarcaba todos lo géneros que conoces e inventaba otros. Era la primera vez que feliz empezaba a bajarme música de la red despreocupadamente y bajaba de todo sin importar, el asunto era regresar a casa y escuchar todo el día a grupos que casi nadie conocía. Conclusión volvía a la era pre Nirvana, nuevamente me sentía vivo, y nuevamente la música me rescataba de mi hastió.
Ahora echemos una mirada a las mayores críticas contra el Indie. Se les acusa de producir en exceso, lo que por ende hace muy desigual su calidad; esa observación es muestra de la total ignorancia de los defensores de la decadente industria musical actual. Es obvio que a mayor producción se generara más desperdicio y merma, lo que es digno de estudio en realidad es el lado del mainstream que produciendo tan poco genera tanta miasma. Una crítica más es que de alguna manera no es música hecha para el pueblo, que es de carácter elitista, pseudo intelectual y no inclusivo socialmente; bueno de verdad que acepto esos cargos sin problemas, todo con tal de no ser parte de ese pueblo estupidizado con el Regeton, Hip-Hop ramplón o insulsos baladistas.
Algo que si me preocupa, y es la corta vida de muchísimos de estos grupos –cosa natural si vemos su actitud con referencia al mercado- y otra que está relacionada es que muchas veces su duración no les permite afinarse creativamente. Cuando hay fortuna y las cosas no son así, solo nos queda agradecer a cronos.
Post Scriptum: Si hay algo que detesto es la gente que se trepa a la ola y luego despotrica de la misma El caso más patético en el Indie es el de la piernona de Lily Allen, quien ahora escandalizada, condena la piratería –en el Indie ese ya no es un problema-, y al parecer tiene gran ansiedad de éxito, fama y dinero. Tranquila Lily que a ese paso de seguro que lo consigues. Verdadera lástima, porque aparte de querer invitarte esta noche a salir, quería decirte que The Fear es una gran canción.
Si visitaste los bares de Jirón Lucanas, pasaste la noche en La Floral, caminaste más allá de la media noche por la Av. arequipa, este post es para ti. Y también te conmoverá si alguna vez como resultado de un desencuentro amoroso la grosera verdad de “mujer que no jode es cabro”, se hizo carne.
En nuestro tiempo hemos visto como el gótico ha sido tergiversado por el sistema de consumo, pero también hemos conocido gente que cada día lucha por desasnar a el llano. Un caso meritorio en estos años es el aparecido hace un tiempo y que usa la pluma como principal medio de difusión. ¿De quién estamos hablando? de una señorita llamada Jillian Venters. Ella ha publicado hace unos pocos meses gracias a Harper Collins un libro que se ha convertido en un clásico instantáneo Gothic Charm School. También reconocida como The Lady of Manners ha hecho una guía de etiqueta, desempeño social, realización de festividades, etc.
Para muchos es algo así como edulcorar el asunto gótico para que la sociedad finalmente “entienda y tolere” esta subcultura. Discrepo una vez más, si bien la Venters puede muchas veces orillar en asuntos dignos de Cosmopolitan o Vanidades –claro ejemplo, es el apartado de cómo vestir al asistir a una ceremonia nupcial- es la primera vez que leo un texto coherente, escrito de manera simple y en lo posible objetivamente distante de lugares comunes.
Jullian Venters al parecer ha vendido poco, hecho predecible ya que no explora el morbo de la gente. Tal vez el gran bestseller literario este por venir, ya habrá alguno que relacione hasta la saciedad la noche, el mal, los ritos paganos, la depresión y la muerte. Ahora que recuerdo bien, me parece que de esos libritos ya hay bastantes, demasiados creo yo.
Post Scriptum : Hay un buen número de páginas dedicadas Marilyn Manson, más exactamente a exponer las razones por las cuales no podría ser incluido como gótico, francamente un desperdicio de papel.
