¿De que va este “docufilm”? Bueno, es una muestra del rock underground en Teherán y de la represión religiosa del islam que prohíbe estas expresiones – y supongo cualquier otra- que no tenga como eje la celebración de Alá.
Relación de absurdos y sin sentidos dictados por el extremismo islámico presentados en la pela:
- Prohibición de manifestar afecto por perros y gatos (animales inmundos según el islam) en público. De tu puerta para adentro no hay problema.
- La barrera generacional. Una mujer entrada en sus cuarenta afirma”!Oh sí! ¡A mí me encanta el Indie! ¡Siempre escucho 50 Cent y Madonna!
- Un modernísimo metro en el que se distribuye, según el género, como son ocupados los vagones. El primero para los hombres, el siguiente para las mujeres.
- Los precios de pasaportes y visas falsificados son una radiografía de su conflictivo entorno. Un pasaporte iraní con visa a Europa 16,000 dólares. Si solo quieres ir a Afganistán, la visa costará 5 dólares.
- ¿Tienes una banda musical y hay mujeres?, estas deben ser al menos dos. Así se asegurará que ellas harán los coros. Nada más tentador para caer en la lujuria que oír el provocador canto de una desolada dama.
- Penas que se pueden contemplar por tener posesión de material occidental de abierta contradicción con las leyes del Corán: Cárcel, multas millonarias y flagelación.
He trabajado y entablado amistad con algunos musulmanes. Recuerdo con cariño a uno en especial llamado Wisam. Tenía una novia peruana, a la cual conoció cuando este trabajaba como barman en un restaurante de cocina mediterránea. Lo peculiar del caso es que como buen musulmán mi amigo es un obediente seguidor del precepto de jamás beber alcohol.
Una vez salí con ellos. Su novia y yo nos bebimos una botella de vino tinto. Wisam nos acompañó con agua mineral. En esa cena y sin querer arruiné sus planes amatorios. Mi amigo arabe evitó los labios de su novia toda la noche. De esa manera eludió el contacto con cualquier vestigio del impuro licor y también hizo que ella decidiera eludirlo a él, para siempre.