Adios Coco

Hoy temprano por la mañana me entristecieron varias cosas pero una de ellas fue el enterarme que Coco Revilla se había muerto.

Mis recuerdos de Coco son pocos. El más marcado es en un concierto en Pueblo Libre que debió ser por el 89 o 89. Coco estaba vestido con un look bien ochentero, me recordaba a la imagen de los Industry. También recuerdo su mirada bien pedilona, entiéndase lasciva.

Esa noche después de Paralelo AB y como antesala al grupo Kaos, Coco salió al frente y empezó a gritar, y a gritar, y a gritar...Después de esta performance que nadie entendió pero que la mayoría aplaudió en reconocimiento a los huevos para hacerlo, me enteré que estaba en amoríos con Mario el bajista de Eutanasia. Años después se fueron juntos a Alemania y luego a España.

Alguien a quien no recuerdo me dijo que se llamaban Silvania y que en Inglaterra fueron considerados el mejor grupo no se en que año ni en que categoría. Me animé a escucharlos y no me gustaron. Luego se cambiaron de nombre a Cielo y me parecieron bastante buenos, seguro por que su sonido era más pop; y no tengo roche en decirlo. Lo que vino luego fue DJ Galax que eran unas fiestas que se hacían en una discoteca que ellos administraban en Madrid y en donde Coco era Dj.

En 2007 creo que estuvo en Lima y dio algún concierto en el Nébula y el bar El Dragón, a través de Youtube pude ver su cover de “Ahora quiero ser tu perro”, ahí me di cuenta que jamás olvidaría la movida subte que lo vio vociferar.

En la página del grupo que ahora es In Memoriam aparecen una serie de temas y varios videos. "Vuelvete Underground" de su disco Paraíso Vacio (2007) de seguro les iba a dar más atención en el mainstream. No sé en qué líos estaría Coco pero me dio pena que la vida lo haya despedido con tinta roja sobre páginas amarillas. En fin, esta fue una mañana de mierda.

Bob Chinn y la saga del más grande

Bob Chinn nació en Hawái y en su juventud decidió estudiar cine en la Ucla. Su primer film fue “The History of Pornography”, documental que explora los orígenes y devaneos del genero porno antes del boom del que él mismo es un precursor. A comienzos de los 70’s aparece “The Danish Conecction” protagonizada por John C. Holmes. Chinn retoma el personaje principal y realiza en 1973 “Johnny Wadd” en donde redondea el perfil del personaje. Dicen que el guión era de tres páginas y que en 24 horas se culminó toda la grabación.

John C. Holmes es recordado por haber tenido “el más grande apéndice sexual de la historia”, aunque en la actualidad se sabe que su record olímpico de alrededor de 35 centímetros ha sido superado largamente. Lamentablemente el creador del mito, Mr. Bob Chinn ha sido relegado injustamente por la historia y es menester de este su servidor el restaurarlo en sus memorias.

Todos de pequeños disfrutamos de algunas series policiales como Starsky And Hutch, Los Ángeles de Charly, Las calles de San Francisco, etc.; pero jamás nos enteramos que a comienzos de los 70’s a Bob Chinn se le ocurría crear algo inédito en la historia del cine para adultos. Una nueva serie con un personaje que largometraje tras largometraje debía encarnar la figura de un detective sofisticado y seductor. Johnny Wadd es el héroe que serenamente y con carisma absoluto escapa de miles de coartadas y que sin más ni más se enfrenta a balazos a los más mugrientos hampones de New York. Pero lo que lo convierte en un justiciero sin parangón es el talento para tirarse a cada culo que se le cruza por delante, implacablemente, sin importar si el cuero es víctima o villana.

La saga llegó a 11 episodios, de los cuales Chinn dirige nueve. En todos esos años que van de 1973 a 1986 el director contempló como Wadd se fue consagrando en la cultura popular y también simultáneamente vió como Holmes va echando a perder su carrera debido a los excesos en que empezó a poner en práctica. El resultado, la rigidez peneal se difumina, las filmaciones se vuelven más extensas de los que los presupuestos permiten. Todos esperaban que el mazo del coloso volviese a alzar vuelo. Holmes fuera de escenarios vuelve a sus inicios, empieza a vender su colgajo a cualquier homosexual que page bien. A finales de 1986 entregado ya casi exclusivamente al mundo gay se entera que sufre de sida. Se acobarda y no se lo cuenta a nadie, vaya a saber a cuantas y cuantos les puso la cruz. Viaja a Europa y filma con la Cicciolina quien jura y rejura que esta súper sanita. Felizmente ya todo estaba por acabar. El 13 de marzo de 1988 Mr. Wadd dejaría de ser el látigo de los criminales para siempre. Tenía 43 años. Su cuerpo fue cremado y las cenizas echadas en las costas de California.

Cuentan que Bob Chinn hizo lo imposible para rescatarlo. Como poder volver a tenerlo en su mejor momento. ¿Qué fue de ese eficiente investigador que en 1977 burló a todos en el caso “The Jade Pussycat”?. Cientos de castings y guiones, pero nada, sequia total. El maestro solo necesitaba tiempo, y el 2001 decide contratar a John Wolf (Joel Lawrece) un joven detective para identificar quienes fueron los que abalearon a Wadd cinco años atrás. La operación tuvo por nombre “Silk And Seduction” Los vericuetos de la investigación llegan a una conmovedor descubrimiento. Wolf es el único fruto que Wadd dejó en este mundo La madre conoció profundamente al icono porno pero jamás quiso confesarle al pequeño Wolf quien era su padre dizque que por no poner en riesgo sus vidas. La verdad es que Wadd se la culeo y luego la dejo por ser una perra más. Es así que Wadd Jr. comienza con todo ahínco a buscar a los criminales, entre tanto se cepilla a todas las mujeres que puede, digna estampa de su padre. Al final venga a su progenitor y promete seguir su ejemplo. Probablemente a la madre se le olvidó decir que pensara al menos dos veces sus intenciones porque alguien por ahí cualquier día le diría que el gran Johnny Wadd acabo siendo un drogadicto maricón.

Billy Mackenzie, todos te recordamos ahora.

Nunca entendí como hizo Billy con 17 años para viajar de Escocia a Nueva Zelanda, de Nueva Zelanda a Estados Unidos. Para sumar lo inverosímil del asunto, en gringolandia se casó con una tal Chloe Dummar para evitar la deportación, y esta susodicha era hermana de un tipo que reclamaba ser uno de los beneficiarios de la fortuna del productor Howard Hughes. No sé bien en que acabó esa relación con Chloe se supone que desde esa época el buen Billy no discriminaba en poder compartir su cama con una mujer o un hombre. De regreso, en Escocia se dedica a cantar con una banda llamada Stan And Deliver, y una noche Alan Rankine que buscaba un cantante para su grupo se impresiona con la voz de Billy y se lo lleva. Después de probar varios nombres deciden quedarse con el de Associates y debutan en 1979 con un escándalo mediático. Se les ocurre grabar un cover del Boys Keep Swinging de David Bowie con el pequeño detalle que Bowie ni siquiera había grabado aún el tema. Líos legales de por medio, el tema tuvo una resonancia aceptable en Inglaterra y todo se arreglo al fin con pago de regalías compartidas, derechos de autor reconocidos y toda esa mierda; y para no faltar a la verdad la versión de los Associates es infinitamente superior a la original de Bowie y eso ninguna corte lo puede poner en juicio.

1980 los hace híper reconocidos por la crítica con su LP The Affectionate Punch (El puñetazo afectuoso). El cure Robert Smith se encarga de los coros en el disco gracias a la amistad que se establece en las giras que ambos grupos hacen juntos. Los Associates funcionaban a la perfección, Billy se encargaba de las letras y el multi instrumentista Alan de la música. Billy con bastante dinero como compositor decide derrocharlo entre otras cosas comprando autos clásicos, ropa carísima, harta coca y mil banalidades más. Francamente creo que su afición por la cría de perros Whippets (así le cagaran toda su mansión) le hubiera ayudado algo más a su confundido espíritu. Al final de ese año Mike Dempsey ex The Cure oficialmente se une a los Associates.

El siguiente año lanzan Fourth Drawer Down, un disco que recopila algunos singles sueltos de la banda, la mayoría de ellos con bastante experimentación sonora, y un salto a la música tecno. Un fracaso en ventas, el giro de la banda desconcertó a medio mundo pero la voz de Billy transmitía una teatral ansiedad cercana al cabaret y la opereta. También vienen las últimas presentaciones de la banda con botellazos, escupitajos y todo lo que se podía lanzar entre el público y ellos. Las drogas de todo tipo se empiezan a volver obligación previa a cada presentación. Martha Ladly (Vocalista de los canadienses Martha and The Muffins) se une como como vocalista de apoyo a la banda.

En el 1982 sale a la venta su obra más conocida, SULK. Otra vez la voz cabaretera, las canciones tienen más gancho "comercial" que la anterior producción, las anfetaminas empiezan a tener más peso sobre la composición, pero al parecer también terminan volviendo locos a ambos, que empiezan a pelear por cualquier motivo, es por ello que el tour de Sulk y la firma con Island Records se cancelan. Alan Rankine se larga, Billy pierde la oportunidad de estar el mainstream; recordemos que era el 82 y todo el New Wave estaba en plena explosión.

Estar en el lugar justo y el momento apropiado nunca fue parte del destino de Billy, y el 84 sale Perhaps. Billy ya algo rayado “extravía” los masters originales del álbum así que WEA le permite rehacer el disco nuevamente el resultado un disco bien pop, pero la disquera no estaba muy satisfecha.

La depresión aparece más marcada en la salud de Billy, empiezan las pepas contra el síndrome de la melancolía pero aún las prescripciones médicas deberían esperar.

Para ganarse algún billete empiezan las colaboraciones para alguna gente como los Yello. El '85 el single Take me to the girl lo rescata de sus inminente anonimato. Casualidades de la vida un tal Howard Hughes homónimo del productor hollywoodense lo apoya en los teclados.

En 1988 Billy estaba lleno de creatividad y presenta el proyecto del álbum The Glamour Chase la disquera le dice que por el momento no y le pide grabar un insufrible cover de Blondie el Heart Of Glass, que aclarando era parte del abortado proyecto.

Felizmente casado y con nuevo contrato ahora para Virgin en 1990 graba Wild And Lonely, no estaba mal pero no vendió mucho.

El 91 se lanza una recopilación de los Associates llamada Popera, la misma es un exito y un descubrimiento para muchos despistados. Extrañamente Billy decide dejar de usar el nombre de Associates con lo que formalmente acaba la carrera de la banda. Alan Rankine se reencuentra el 93 con él y empiezan a ensayar, la cosa no dura mucho las diferencias son irreconciliables. La escasez económica recae sobre nuestro muchacho, entra en una seria depresión, pero continua trabajando en su disco solista Outernational que es bueno pero nuevamente no vende. Ahora sí y sin roches los médicos prescriben y prescriben. La imagen de personaje del New Wave hace que en 1996 el mismo sello de los Suede le ofrezcan un buen billete para concretar su regreso a la industria musical. El disco Beyond the Sun se empieza a grabar pero la madre de Billy se terminaba de morir después de luchar contra el cáncer. Un 22 de Enero de 1997 la cabeza de Billy era un revoltijo, el hueco de la depresión era inmenso y las pastillas que ayudaban a sobreponerse lo hicieron tomar el vuelo hacia el mas allá, así acabó con su dolor y con esa ondulante vida llena de bríos y tinieblas creativas. Ese día bajo el cobertizo del jardín, en casa de su padre se fue una de las voces más brillantes que he oído en mi vida. Después, lo de siempre, rumores absurdos de amoríos entre él y Morrisey, su doble vida casi descubierta, el reconocimiento de iconos como Souxsie Sioux que concertaba una cita con él pocos días antes de su partida, canciones de tributo hacia él como la de la misma Siouxsie “Say” y la de los Cure “Cut Here”y por ultimo la publicación póstuma del Beyond the Sun a fines del 97 y del The Glamour Chase el 2002. Una vez más Billy Mackenzie estaba fuera de lugar y fuera de tiempo.