Quiero empezar con esta premisa “El humano ha tratado inútilmente de unificar el amor, el sexo y el matrimonio” y claro es cierto. Si jugamos con las tres variables podríamos decir que hay sexo sin amor, amor sin sexo, matrimonio sin amor, amor sin matrimonio, etc., el asunto es si es posible que esa divina trinidad cultural sea finalmente aprehendida por mujeres y hombres, y la verdad es que resulta imposible. Cabe que exista por breve lapso; por ejemplo, un enamoramiento fulminante y un compromiso presuroso para concretar eróticamente los deseos; aquí tendríamos que contextualizar a la pareja en una época muy anterior a nuestro presente y/o en un ambiente de estricto conservadurismo.
El tópico es más complejo de lo que se cree. El amor eterno que se juran unos a otros no es realmente entendido. Se confunde una y otra vez el enamoramiento –que está más cercano a la pasión y a la ilusión- con el amor, es decir, cuando vemos esas insoportables telenovelas mexicanas cuyo trillado fin es el beso autorizado por el ministro religioso que supone el triunfo del amor sobre la perfidia de los otros, se evita hacer una secuela de la novela porque lo que sigue luego es el verdadero amor y ese jamás será bien recibido por la muchedumbre. Si pues, el amor es una actitud, no un sentimiento.
Pausa inicial
"Si al principio, el los leves movimientos de tu amor, ya prevés tus desgracias, haz alto allí, sofoca el germen malo de enfermedad mortal desde la entrada, que siempre la demora le da fuerzas."
El sexo que para el ser humano en general es el segundo impulso más importante después de comer, divide abiertamente a hombres y mujeres. Por ejemplo, cuantas veces se mal baratea la expresión “el hombre es naturalmente polígamo” bueno lo siento amigas mías, lo es, y es genético, atávico y después de miles de años la cultura no ha podido subsanar este hecho. Entonces ¿porque la mujer insiste en hacerse de un compañero para toda la existencia?, bueno, la repuesta la han escuchado muchas veces y jamás se le ha prestado atención. El cerebro derecho e izquierdo del hombre no están debidamente integrados, es decir fácilmente separan lo racional de lo emocional. En términos prácticos el macho puede aparearse indiscriminadamente con el objeto erótico de su deseo de ocasión y luego regresar a los brazos de su eterna compañera como si nada grave hubiera ocurrido, ¿Y la mujer que deja posar al hombre sobre ella? de eso se habla menos aún. Volvamos al cerebro, la mujer integra mejor sus dos hemisferios cerebrales y esto la hace más ecuánime, menos extremista y por supuesto mas contenida, todo lo anterior sin embargo no evita que ella siga viendo- como hace millones de años- al hombre como al que le brinda protección y que de darse el caso le dé hijos sanos, inteligentes y fuertes. ¿Qué armas de seducción utilizan las mujeres para el propósito de tener a su hombre para siempre? bueno, sus dotes naturales y sobre todo su artificialeza, es decir toda la parafernalia de la belleza como su maquillaje, vestido, gestualidad seductora, etc. Lo que las damas olvidan es que el hombre no discrimina, puede acostarse con todas y no tomar a ninguna como esposa, una tragedia, una retahíla de corazones rotos. Y así será, las mujeres seguirán compitiendo por la belleza - a más belleza más signos de salud y más dada a fertilidad- y por supuesto los hombres se encargaran de premiar esos encantos más que a la inteligencia, y las mujeres a cambio invertirán por siempre estas prioridades.
Pausa Intermedia
"Los misterios del amor son del alma pero un cuerpo son el libro en que se leen."
Alex Cuba es de Cuba. Los cubanos por razones políticas, culturales o simplemente por razones que solo la naturaleza entiende no me quieren mucho y esto en Miami puede resultar muy contraproducente, sin embargo este habanero que con buen tino vive en Canadá lejos de la histórica sede de la diáspora de sus coterráneos, me parece un artista decente y su "Sí, pero no" es un peculiar y muy viril desojar de margaritas
Para hablar del matrimonio me parece bueno contarles el argumento de un corto alemán dirigido por Ole Zapatka llamado Jai ch will (2006). Cuenta que un día el personaje principal a quien llamaremos K se siente fervientemente animado a casarse consigo mismo. Su gran amigo de toda la vida y actual párroco de la capilla de su pueblo se encarga de hacerlo ya que no existía ninguna prohibición bíblica para realizar el sacramento. Nuestro recién casado rápidamente empieza a disfrutar de la mieles de matrimonio, se ama locamente, se comunica consigo mismo de manera fluida, comparte consigo mismo sus aficiones favoritas. Pero esta felicidad pronto es puesta en peligro cuando una vecina intenta seducirlo, y es así que K cae primigeniamente en el adulterio. El remordimiento es insoportable por lo que acude al sacerdote amigo y le cuenta su pecado. El ciervo del señor le da su penitencia y es absuelto. Transcurre un tiempo hasta que la verdadera infidelidad aparece en el singular matrimonio de K, es imposible llevar la templanza debida, la tentaciones son innumerables. Al final de la historia K decide divorciarse de si mismo para casarse con una mujer que realmente ama más que a si mismo. Y todos no quedamos preguntando cursimente ¿Saldrá el amor bien librado de este nuevo matrimonio?
Pausa final
"Tu cuerpo en la sombra, en el silencio, es territorio de otro amor, no del mío."
Joaquín Sabina es por así decirlo un preclaro conocedor del amor y es su poema llamado "Sin embargo" una hermosa, sincera y lacerante estampa de nuestra frágil condición humana.
Para acabar un poema de Eielson:
poesia en A mayor
y vivir sólo de Amor
y mAr
y mirAr siempre el mAr
con Amor
mAgnífico morir
Al pie del mAr de Amor
Al pie del mAr de Amor morir
pero mirAndo siempre el mAr
con Amor
como si morir
fuerA sólo no mirAr
el mAr
o dejAr de AmAr